Nuestro primer programa de intervención, cunas con amor, formó parte de una investigación realizada por la Universidad de Helsinki. Esto se logró gracias a dos puntos claves. En primer lugar, hubo un acercamiento con la Embajada de Finlandia en Colombia, en el año 2007. Además, el apoyo de nuestra doctora, científica y epidemióloga Julieta Villegas fue fundamental. Como resultado, logramos figurar en la publicación La caja del bebé. Mejorar el bienestar de los bebés y las madres de todo el mundo. Esta tenía como fin descubrir las repercusiones y variaciones del uso de la caja para bebés alrededor del mundo.
Propósito de la “Baby box”
La idea central de las cajas para bebés es “proporcionar apoyo material y promover el bienestar del bebé, la madre y la familia”. Dicho material engloba artículos (ropa, elementos de higiene…) que van al interior de la caja u otro tipo de contenedor. Estos, basados en el objetivo del programa, la evidencia científica y las recomendaciones académicas o gubernamentales.
Algunos programas utilizan cajas de cartón, como nuestras cunas ecológicas. Sin embargo, otros emplean cajas de bambú, de madera, de plástico, bañeras, cunas y bolsas para bebés. Todo, teniendo presentes las condiciones del lugar y la calidad en el diseño y la fabricación.
Más allá de lo material
Lo mencionado del bienestar hace alusión a la destinación de las cajas como un espacio propicio para un sueño seguro. Este concepto “se refiere a prácticas que minimizan el riesgo de muerte infantil súbita e inesperada (SUID), que incluye el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) y accidentes fatales del sueño”. Justo este es nuestro pilar fundamental en el quehacer de Fruto Bendito.
Nos emociona conocer que nuestro programa para la consecución de la equidad, también es primordial en otros programas alrededor del mundo. Por ejemplo, en Alaska, “el programa en Bartlett Hospital Regional incluyó educación para las madres que dan a luz en el hospital sobre el sueño seguro y una caja de cartón para bebés para fomentar prácticas seguras para dormir”. Caso similar al de nuestra fundación.
Asimismo, un componente clave en pro del bienestar de los bebés, mamás y familias es la educación. Ciertamente, es importante para concientizar sobre la salud y bienestar materno infantil. Esto, incluyendo temas del “cuidado de niños, problemas de higiene y salud, sueño seguro, lactancia materna, planificación familiar, salud materna, embarazo y parto, servicios disponibles de salud y prevención y atención del VIH y la malaria”. Algunos de estos temas, además del sueño seguro, son pilares de Fruto Bendito. De igual forma, son incluidos en el Plan Bendito de educación, tales como la lactancia materna, embarazo y planificación familiar.
La caja para bebés alrededor del mundo
La “caja para bebés” fue implementada en los 90 ‘s como una cesta circulante para diferentes madres. Fue la respuesta de la Liga de Bienestar Infantil de Mannerheim ante las altas tasas de mortalidad infantil en Finlandia. Luego, el gobierno finlandés comenzó a proporcionar las cajas a madres desfavorecidas. Al término de diez años, el programa se convirtió en una subvención condicional.
Actualmente, todas las embarazadas que residen en Finlandia “han recibido la caja para bebés de forma gratuita, independientemente de sus ingresos, con la condición de que participen en la atención prenatal (ANC) al final del cuarto mes de embarazo.”
Este programa, como una innovación social y un apoyo a la salud pública, ha recibido atención internacional. Se ha convertido en ejemplo para ser tomado y aplicado en diferentes lugares alrededor del mundo. Precisamente, en esta importante investigación de la Universidad de Helsinki fueron incluidos 29 de estos programas de todos los continentes. Promovidos tanto por organismos gubernamentales, ONGs, sector público y sector privado.
La mayoría de estos programas son implementados en países con ingresos medios. Además, con posibles limitaciones en la salud local o en sistemas de protección social. Cada uno es aplicado en aras de abordar diferentes desafíos, desde garantizar un parto seguro, hasta evitar el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante. Adicional a esto, la caja para bebés puede convertirse en un incentivo para que los padres actúen en función del bienestar de ellos y del de sus bebés.
Similitudes y diferencias
Los programas estudiados por dicha universidad también varían en cuestión de sus beneficiarios. Por ejemplo, en Escocia el plan es proporcionado por el gobierno a todos los padres del país. Pero otros programas, como el nuestro, se encargan de atender grupos más específicos. Como lo mencionan en esta importante investigación, nuestra fundación implementa el programa para reducir las desigualdades. Sin embargo, debido a los recursos limitados en uno de los países más inequitativos del mundo (Colombia), “la organización se quedó sin otra opción que ofrecer el programa sólo a los grupos más vulnerables”.
Este tipo de programas específicos atienden a grupos reducidos. Por ejemplo, a familias pobres, primerizas, que sufren desastres naturales, inmigrantes, indígenas, refugiadas, madres solteras, en prisión, adolescentes, discapacitadas o cuyos bebés tienen alguna discapacidad. Además de estos beneficiarios, también los programas ayudan a través de empleo al resto de la comunidad.
En la misma línea, el alcance de los programas también varía. Este depende de los recursos disponibles a través de sus modelos de financiación, teniendo en cuenta el tipo de organización y el contenido de la caja. Organizaciones sin fines de lucro, como lo es Fruto Bendito, dependen de donaciones monetarias o en especie, tanto de individuos, como de empresas privadas. También son utilizados medios como las redes sociales en la consecución de donantes.
Al interior del artículo se menciona que “varias organizaciones sin fines de lucro mantuvieron un programa comercial de cajas para bebés junto con un programa de beneficencia”. Esto se refleja en nuestra fundación, que vende algunas cunas con amor a madres ecológicas. Las mimas que luego apadrinan a la población vulnerable.
El “plus” de las cajas para bebés
Estos recursos económicos y en especie, más el apoyo de distribuidores, permite la obtención de artículos para incluir al interior de las cajas para bebés. Algunos de los elementos que más se proporcionan dentro de los programas son ropa para el bebé, productos de higiene (pañales, toallas húmedas, jabón), productos del cuidado (aceites).
También se incluyen materiales de información para los padres y artículos médicos (termómetro, dispensador de medicamentos). Incluso, algunos programas integran elementos propios de la cultura. Por ejemplo, el chitenje. Es una tela tradicional para llevar al bebé en la espalda en África Oriental, Occidental y Central.
De manera similar, algunos programas del mundo incluyen elementos para el proceso de lactancia de la madre o anticonceptivos. En aras de prevenir el VIH u otras infecciones. Además de poyar la planificación familiar y garantizar que las mujeres tengan mayor control de sus cuerpos.
Además, algunos programas de cajas para bebés en el mundo le apuntan a “involucrar a los padres durante el embarazo”. El hombre se reconoce como un agente de cambio positivo. Su participación puede contribuir a la buena salud materna y neonatal. Dentro de la investigación, se halló que al aumentar la participación masculina durante el embarazo se da como resultado “una mejor nutrición durante el embarazo, un mayor acceso a la atención prenatal y postnatal, atención obstétrica de emergencia oportuna y una disminución de la depresión posparto”.
Una herramienta de amor
Como resultado, se evidencian similitudes en los 29 programas incluidos en el artículo. Esto, en cuanto a sus objetivos y recursos físicos proporcionados. Sin embargo, también pueden distar entre sí, dependiendo de la zona donde intervienen los programas.
Sobre todo, estos programas de la caja del bebé funcionan “como una herramienta de apoyo social multidimensional. Tienen un potencial significativo para una mayor innovación, desarrollo e integración con otros esfuerzos para promover la vida de las madres, los bebés y las familias”. Estas cajas, al igual que nuestras cunas con amor, son un instrumento de bienestar e igualdad, por una sociedad donde seamos iguales con amor.